El año pasado nos llevamos el disgustazo con Sandy y la cancelación del Maratón, estando ya en NY (Reitero y confirmo que me parece una decisión acertada, más habiéndolo vivido desde dentro este año como la fiesta que es para la ciudad… pero no se hizo bien en cuanto a plazos de aviso), además yo no estaba muy fino (A causa de la lenta recuperación de la fascitis-tendiditis en el pie, y parte de la pierna izquierdos… fue el entrenamiento más duro que he tenido, porque no estaba tranquilo nunca… más de un día me tuve que volver andando a casa), y seguro que lo había acabado pagando caro.
Y desde aquel día todo ha cambiado mucho… para empezar entrar en un club, compañeros, amigos, entrenamiento por objetivos, técnica, un mejor control de la alimentación, estirar estirar y estirar… muchos cambios para bien, que también han tenido su impacto positivo en el rendimiento deportivo.
Un maratón es su preparación… en mi caso han sido 9 semanas de entrenamiento específico (Cerca de 900kms) + toda la base anterior (No se puede partir de 0 a hacer semanas de 100kms y más, en 5 sesiones, sin sumar el cruzado de la bici-piscina, y me ha ayudado mucho disfrutar de carreras populares en algunos pueblos de Ávila, y la incursión al mundo triatleta gracias a los amigos de TriÁvila. “El verano de los 4º puestos”). Otra buena ayuda para la base ha sido el entrenamiento veraniego junto a mi tocayo Arturo Casado, a través del programa 100Valientes de la Comunidad de Madrid (Cuyo fin es preparar a jóvenes de la CAM para “Madrid Corre por Madrid” donde he conocido a nuev@s amig@s estupend@s. Una auténtica escuela de motivación, donde cada uno hemos compartido nuestras mejores experiencias…
La pre-maratón ha dejado muy buenos entrenamientos (Ya que vamos perfeccionando el maratón base, que fue el 2º en mi carrera deportiva, Madrid 2013), y grandes competiciones dentro del plan, entre las que me gustaría destacar:
- Medio Maratón Ciudad de Soria: 1´16´55” (4ºclas)
- 10.000 (Madrid Corre por Madrid) 35´03” (11ºclas)
- Medio Maratón Valencia: 1:17´35” (120º)
- 10.000 Corre por el Niño (Fundación Hospital Niño Jesús): 34´43” (7ºclas)
Llegué a Nueva York el viernes previo a la carrera, y “casi” corriendo pude llegar de refilón a la feria del Corredor antes de que cerrasen el acceso (19:00) una vez dentro, vía libre para quedarte un buen ratazo (Para un corredor esto es un parque temático… como para las de “Sex on the City” la 5ª Avenida). ¿Por qué tantas prisas teniendo el sábado? Mi única premisa era descansar el sábado… que nos conocemos, por lo que sólo salí del hotel para la foto de dorsales de la familia 42195.es ( Una vez más he viajado con ellos, y ha sido un auténtico lujo el grupo que hemos hecho, y con los nervios que tiene un maratón no es tarea fácil encajar tan bien).
En la feria del Corredor en el "Jacob Javits Center" con la familia 42195.es
Sábado:
Un buen desayuno en un restaurante a lo “Pulp Fiction”, para no variar la alimentación pre-carrera: Claras de huevo con champiñones, verduras y un café… lujazo encontrar esto por allí. Antes de acudir a la foto con todos los compañeros, y con las piernas “como estacas” del avión, decidí acercarme a ver la meta en un trote… 20´ (5´ apróx) muy muy suaves y un poquito de técnica para echar un buen vistazo al final del maratón.
Zona de meta. Línea azul del maratón y amarilla en honor a Boston Marathon
Comer y cenar pasta (Típicos “Delis” que salen por todos lados en NY, y hasta me echaron la bronca por poner poco en el plato… allí todo tiene que ser siempre XXL).
Prontito a la cama, a eso de las 21:30-22:00, teniendo en cuenta el cambio de hora, que en EEUU es la noche del 3 de noviembre… por lo que ganamos una hora de descanso y de nervios.
Domingo 3 de noviembre: MARATHON DAY
A eso de las 3:40 en pie, ya que según la organización mi bus salía a las 5:30 de la Public Library (5ªAv-42st), y aunque el trayecto entre metro y pie era de unos 30 minutos, más vale prevenir…
Finalmente, y pese a que tenían la opción de poder ir en ferry, Paco y Koldo se animaron a venirse conmigo, y pese a que su horario de bus era más tarde, todos nos fuimos a las 5:00 camino a Staten Island en uno de los primeros buses.
Llegada a Staten Island en unos 40 minutos, y al bajar del bus se preveía el día… La noche anterior nos metimos a la cama con casi 15ºc y amanecimos a 1ºc con viento y el cielo despejado… hasta el momento mal presagio LPasamos los controles de seguridad (No te dejaban introducir elementos que pudieran resultar peligrosos… en mi caso UNA MANTA), pero íbamos abrigados hasta arriba, ya que la ropa luego es donada para los “sin techo” de la ciudad… por ese lado muy bien.
Allí ya la división, por colores, y más tarde por corrales, en función de la hora de salida (Que tiene que ver con la marca acreditada, así como los diferentes “campeonatos” locales también: De la naranja 1, por ejemplo, salían todos los “federados top” en NY… algo así.
En mi caso 1- Azul, justo detrás de la élite, por lo que en principio no supone mucho problema para la salida, además de ser la más mediática, junto al escenario, en el comienzo del puente de Verrazzano.
Horas de espera, mucho frío y aquello que se empezaba a llenar como si fuera un festival playero… para la espera café, bagels y otros “detalles” de los patrocinadores (Servidor un café y un trozo de bagel… no la vayamos a liar ahora con la alimentación). A mi lado se quedó Koldo, de Bilbao, y conocimos ya en la carpa a gente de todo el mundo con la que matar el tiempo, como Mikel (Que nos veremos por Elgoibar si es posible para el cross), Michael de Argentina… y mucha gente, no estaba yo para muchos nombres.
Entre visita y visita al baño por los nervios y querer salir “vacío” totalmente, aprovechaba para repasar mis ritmos de carrera (A lo “Memento” en el brazo, como acostumbro en Maratón), que acabé de definir la noche anterior. Ritmos que me iban a llevar desde un hipotético 2:38´ en circuito llano y sin problemas físicos ni climatológicos, hasta los 2:45´… tenía una especie de variantes a partir del 21, que determiné como punto de decisión.
Una hora antes, vamos a los cajones de salida, divididos en 1000´s. Una vez dentro (Y aún lejos de la zona de salida) último baño (En el que hice más de 30´de cola), y continuamente nos recordaban que hacer cualquier cosa fuera de los baños era motivo de descalificación… (No acabo de creérmelo, pero según son allí de estrictos, y con lo que ha costado llegar… quita quita). Me llamó la atención lo relativamente pequeño que era el corral, y que no había espacio posible para calentar (Cosa que no me dio tiempo por el maldito baño), y ni aunque hubiera querido hubiese podido trotar a “paso burra”… ni progresivos, ni nada de nada.
Quitándome toda la ropa que llevaba encima con prisa, me dejé los guantes en uno de los bolsillos… por lo que ya dependía de dar palmas, a lo que recurrí también para calentar las piernas.
Nos llevan a la zona de salida, y logro colocarme bastante bien (No olvidéis que siguen siendo 1000 personas) y me llama la atención un pasillo en medio. De él salen unas cuantas veintenas de policías y bomberos (Ya que tienen prioridad por su servicio a la ciudad), y se nos ponen delante… Los había de todo tipo, pero los clásicos ansias 6´ el 1.000 también están en el ajo para la foto. Liada.
Cerramos "el sándwich" con los élite, que pasan al ladito mía, junto al pasillo: Meb, Mutai, Kebede, Kawauchi, “nuestro” Chemita Martínez (Que responde al “Vamos” con otro “Vamos”; no había mucho español por allí… J) y por supuesto (Y al que más ilusión me hizo chocar palma, por aquello de lo romántico de currar y correr…) Yuki Kawauchi. ¡Enorme!
Previo a esto, salida de sillas, algo así como representantes de cada barrio, las chicas, y nos comienzan a dar charlas… típico: mandos políticos, presidenta del NYRR (New York Road Runners, organizadores de la prueba, y por fin el himno “Star-Spangled Banner” (Que con un coro, el frío y tal, piel de gallina… me parece bastante emocionante siempre en todos los eventos). Pistoletazo de salida y comienza el “New York New York” que tan popular hizo Frank Sinatra, interpretada por Gary Russo, con el que crucé un par de saludos y gestos por el frío… estaba el hombre quietecito, tieso tieso (Gary era un obrero de contrucción famoso gracias a Youtube por cantar entre andamios, y que imagino, ahora se dedica a versionar a Sinatra… IMPRESIONANTE) Como os conté, liadita a la salida, un poco de codos y apretón para coger sitio (Una locura sin haber calentado bien… MAL) cuando miro al Garmin: 3´20” y tenemos la cabeza de carrera a tiro… stop y ritmo previsto ahora que tenemos sitio.
El puente es enorme (1300 metros) y pica mucho hacia arriba… Todos los puentes son así, ya estaba avisado, pero me sorprendió muchísimo la dureza de los mismos, tanto no esperaba.
A mitad del puente, y ya bastante solitos en un pequeño grupo, airazo y adiós gorra (Yo que quería emular a mis amigos Darío y Jaime, que tan bien les va sin perder calor por la cabeza).
Cerramos el primer km a 3´52” y bajando el puente ya se puede escuchar al público. Te sientes como en la final de un mundial jugando en casa… y con que levantes un dedo todo el mundo se viene arriba… increíble. Entramos en Brooklyn, con todo el público y decenas de bandas de música en directo. Yo iba preocupado por lo de no calentar, pero un rato conversando con un chico francés, de Lyon, y hablando sobre los Pirineos, las playas de Valencia, un poquito de fútbol, por supuesto conocía al Rayito, y algún recuerdo al Olympique que tanta guerra dio en Europa… “Menudos free kicks zambombazos tiraba Juninho Pernambucano eh colega”.
Paso por el km 5.
Nos vamos al 5 (18´33”), sin problemas y con un ritmo medio de 3´39” debería ser 3´40” pero ya sé que a partir del 21 “me van a dar por todos lados”. Las nubes comenzaron a ganar terreno, y entre el 10 y el 15 empezó a soplar muy fuerte el viento del norte (Al día siguiente pude ver que aproximadamente el 70% de la carrera nos vino de cara), que debido al trazado ascendente del maratón y lo amplias que son todas las avenidas nos dificultó mucho el trabajo. Seguimos en Brooklyn y pasamos el 10 (36´58”) manteniendo ese mismo 3´39”. Gracias en parte a la grupeta, que no bajaba el ritmo en ningún momento.
Avituallamientos por todos lados: Al ser un maratón tremendamente popular, cada milla había puestos de avituallamiento con energéticas, que ni caté, nada de probar cosas raras, y agua. A la altura del 25 o 30 comenzaban los de sólido con una tienda andante de geles, distribuidos por sabores y todo… (Otra cosa que no probé, pero lo llevé en la mano un rato, por si acaso) Enormes puestos con muchísimos voluntarios a ambos lados. ¿Os imagináis esto cada 1600 metros… Amazing? Peleas entre los chavalines para ser “el elegido” para que le recogieras un vaso y griterío posterior de ánimo sobre todo por “tu aguador”. Nos vamos al 15 con 55´48” según la previsión más optimista, rodando a 3´44”.
Vistazas de Manhattan desde Queens. Al fondo edificio Chrysler (1930)
Las vistas de Manhattan son impresionantes desde todo Brooklyn, lo que también me tiene muy “embobado” jugando a distinguir edificios JAquí empieza la buena parte del viento acabando Brooklyn, y empiezo a echar de menos los manguitos que con la emoción me quité en el 10, regalándoselos a unos chavalines… y el primer puente, Pulaski, que aunque era “pequeñito” (Igual tenía 900 metros…), era un buen aviso de lo que son los puentes. El grupito hacía ya un buen rato que se había separado entre avituallamientos, cambios de ritmo… y me quedé ya “solo”. Solo hasta el 35. Pasé el 20 en 1:14´54” y comienza el puente de los puentes: Queensboro.
Queensboro Bridge, uniendo Queens y Manhattan, dejando debajo Roosevelt Island. (By Jason Hawkes)
Lo particular de este puente es que pasamos por medio (Por la parte techada), y el suelo, es el más duro que he pisado en mi vida. Una especie de hormigón armado+ metálico cubierto por una fina capa de asfalto, fina fina, porque se notan las rejillas del metal. Ahí además el gps deja de emitir bien datos, por lo de ir techados, y el ritmo baja muchísimo, lo noto en todos los corredores que tengo “cerca” paso a alguno, alguno me pasa y me intento enganchar a su estela, sin éxito, y miro hacia el sur. Me sorprendió muchísimo ver que aún no había ni rastro del East River debajo de mí… y no era la Roosevelt Islad que queda entre Brooklyn y Manhattan, no… Paso del medio Maratón al rato de empezar el puente: 1:19´09” (3´50” picando el puente para arriba)
Cuando notas que la inclinación comienza a ser favorable, también ves el final, y de nuevo se escucha a la gente. Los que lo conocen ya me habían avisado de que no me viniese arriba, ni intentase recuperar lo perdido en la subida, porque luego lo pagas… por lo que a hacer caso. Cabeza. Salimos a la 1ª avenida, que es el tramo más largo de la carrera en recto, y nos encontramos con todo el viento. La animación ayudaba, pero aún con todo pasé un rato maluno entre el 25 1:34´46” y el 30: 1:54´12”. Llegué a llevar un ritmo de 4´ durante el primer parcial, buena culpa del puente, y después no logré alejarme mucho, pero sí tener el 3´como primer dígito, luchando contra el viento (Recuerdo la Avenida de Valladolid en el último maratón de Madrid, y al bueno de mi amigo Miguel Del Pozo, intentando taparme el viento) Me estaba acordando de no haber calentado, notaba los cuádriceps durísimos, y sentí el miedo que da ver a gente parada… COMIENZA EL MARATÓN.
Tirando a solas en la 1ª Avenue
No veáis lo que me estaba acordando del colega francés (Que en el 15 se me quedó y no volví a ver), y sobre todo de Juninho Pernambucano… (Y si me pudiera subir a un balonazo de esos que tiraba para pasar la 1ª avenida en un abrir y cerrar de ojos)
Entre alguna risa con españoles y algún “Vamos Suanzes”, que me hacen volver a venirme arriba y olvidar los problemas y ese fantasma de abandonar que en estos kilómetros acecha, me veo en el 35 (2:22´01”) habiendo pasado ya el Bronx y cerrando Harlem (Impresionante la animación también en barrios que no están tan favorecidos). Logro empezar a dar caza a caras conocidas de Queensboro, y empezamos con los ánimos entre todos “good job” “U´ have it” etc… entre los que subimos la 5ª Avenida (Que tiene un comienzo, y no es tan glamuroso como la zona Premium de las tiendas). Cuestaza al canto, y recuerdos, muchos recuerdos de Alfonso XII, ains... Madrid Madrid. Esta ciudad te enseña a subir, y vaya. Sigo pasando a corredores, y entramos en Central Park con sus “toboganes” a lo Serrano en la San Silvestre Vallecana. Km 40 (2:34´26”) y a mantener el ritmo. De nuevo aprieto un poco para seguir pasando gente entre los ánimos del público (Veo a las compañeras de algunos de los amigos de 42195.es), que no se creían el verme, jejeje, y decido volver a un ritmo coherente, “no nos vayamos a romper ahora”, nunca se sabe en el Maratón.
Saliendo "presto" del Bronx, con mejor cara :)
Eso sí, intento aplicar “mi regla” del 1500 (No ser pasado y pasar) cuando intento siempre dar todo lo que queda como si estuviera en la mítica distancia. Tampoco tenía mucho ya, pero logré rascar algún tramito a 3´20”, evidentemente buscando un final como a mí me gusta. En todo vi a otro corredor en la milla 26 (recuerdo que son 26.2) y me fui a por él… mi último puntito, logré hacerme con él y sacarle unos metritos “cómodos” para pasar por el graderío ya sonriendo tras el apretón de dientes. META, gritazo y lagrimones.
MMP en Nueva York, en NUEVA YORK 2:43´12” 133º de la general y 3ºespañol (Tras Chema Martínez y Oscar Martín). Para estar muy contentos viendo también como las marcas de los líderes se resintieron por el día que tuvimos en Nueva York: 2:08´24" Mutai. (2:05´24" en 2011)
"Meta. Se me escuchó hasta en Staten Island"
Después cientos de felicitaciones hasta salir de Central Park y más grandes momentos con los atletas que justo finalizaban, hablé con gente de Nueva York, de Holanda, y por fin con italianos… Un “Tu cara me suena”, me presento y Stefano Baldini (Que ha entrado unos segundos detrás de mi): ORO Olímpico… abrazándome con un oro que sigue guardando la forma, menuda guinda para NYCM… Piacere Mr. Baldini.
"Gustándome" con el público ¡Energía en vena!
En resumen: Si amas este deporte, y el maratón va a ser tu modo de vida, Nueva York es el número 1. Imperdible. Y si te gusta animar también, bienvenidos a NYC.
¡Además también me he tomado una buenas vacaciones disfrutando de toda la ciudad de Nueva York, nuevos amigos, conociendo Washington... completísimo!
No quisiera dejar de agradecer a tod@s los que me habéis apoyado en esta aventura, y prometo muchos kilómetros, metas y objetivos, a mis 26 no me queda más sino intentar crecer y crecer con trabajo, esfuerzo e ilusión:
A mi familia, mis amigos (Y nuestro proyecto de Runner´s Team, así como TriÁvila donde os acompañaré en verano con la bici y el gorro de nadar), mis compañeros y amigos de Suanzes, Rotary Ávila, Ainhoa y su familia, los laborales, mis compañeros de viaje, especialmente Paco, Koldo, los grandes del grupo de Informe Robinson y su compañía, los amigos que el año pasado vinieron y este no, Pakis, Víctor, Félix (Fotorunners, uno de los mejores fotógrafos deportivos, y no deportivos :) ), Rubén... y por supuesto todos los amigos que cada día compartimos nuestros sueños online, aunque la mayoría ya estamos más que desvirtualizadísimos y con los que aprendo y me divierto a diario: Teresa (Y tu detallazo con el diario de corredor “offline” que tan buenos ratos me ha dado ya), Pakis, Darío, Jaime, y de nuevo Miguel (que menuda retransmisión en directo montasteis en twitter, prometo mucha guerra en Valencia, y futuras maratones) Pablo y su Running Consulting, los grandes DrinkingRunners, todos los medios que se han preocupado por nuestra causa y todos mis amigos de la franja que cruza el alma. ¡Cada uno de vosotr@s me ayudáis a seguir!
¡También es vuestra!
Ahora vamos con la temporada de cross, con ganas de clavos y barro, lucharemos contra el crono en la San Silvestre Vallecana (Esta vez entrando en la Internacional y pisando el césped de Vallecas, como ha de ser) y en unos días decidimos Maratón de primavera… pintaza Rotterdam, aunque Milano también llama... ¡Sin objetivos estamos vacíos y sin rumbo!
¡UN ABRAZO ENORME!